Dios está enojado y se deshoga no de risas sino de cielos, nublados, nublados. Entonces, creo que no está enojado-digo cuando miro esos cielos- él está tiste como yo. Está sentado como yo leyendo, el libro de la vida…yo no sé que leo. Pero leo.
No lo sé, me perdí el comienzo de esta oración porque estaba pensando en una persona. No importa quién es. Quizás necesito, que vos, te vuelvas a parar y enviar un milagro pa –tucumanismo- este lado donde hay silencio de vacío y tristeza.
Los ángeles no entonan. Las canciones ya no entonan la vida, mi vida. Ellos perdieron la mágia desde que el Barbudo está triste. Todos en el cielo enmudecieron o abandonaron el paraíso. No entiendo, pero la nada llegó hasta ahí, hasta la casa del omnipotente Creador.
He recorrido cada camino,… para poder ser feliz, reírme a carcajada y terminar como Alfonsina Storni. Por lo menos, ya estoy en BSAS, pero no quiero terminar como ella. Quiero ver que le pasa a Dios en su oficina – dicho vulgar, Dios está en todas partes. Pero atiende en BSAS- será cómico e hilarante desafiar a Holmes. Cuando uno no tiene nada que lo ata y tan sólo la sed de descubrir sólo quiere tirarse desde el cordón de la calle al pavimento para hacerse la suicida y pegarse un golpe y gritar: oh! Soy artista.
La mecanicidad de los corazones en esta ciudad son las mismas que la de mi provincia.. En el presente la idea es todo termina rápido, vivís, cagas, aprendes hablar, ganas tú dinero, hijos y nietos, muerte; un ciclo que hoy es mas rápido que una enfermedad cancerigena. El amor ya no es romántico donde una pareja amaba y peleaban juntos antes las diferencias, aseveran – los mortales equilibrados de la cabeza-que eso es una idea de otros tiempos. Debo aceptar que los tiempo corren, corren, corren, y que el divorcio es una de las armas mas fáciles de este hoy.
Bueno, tata, no estés triste.
Tata, estoy yo. No sé si eso te sirve.
El cielo está nublado, tata.
Desahogo, nada más que eso.
Desahogo.